viernes, 31 de agosto de 2012

68,7 kg

¡YUJUUUUUUUUUUUUUUU!

Ni de lejos voy a perder los 4 kilos que me había propuesto esta semana (¡JA!) pero el sábado, creo, estaba en los 70 con algo por no controlarme nada y ahora ya estoy en los 68 con algo y sin ser super, super, super estricta. Aaaay, señor mío, si yo tuviera una voluntad de hierro, los kilos que perdería en cuán poco tiempo...

Pero bueno, esta no era una entrada pensada para lamentaciones, es una entrada de victoria. Como ya dije, poco a poco, pero sin parar nunca, al final se llega a la meta. Con constancia y con esfuerzo. No hay más misterio. Porque ayer no me apetecía andar, me habría ido a dormir nada más acabar la cena, pero me dije: "Querida mía de mi corazón, tu humor cada mañana depende de si el número de la báscula ha bajado o no. Sabes bien que no te gusta tener días de mierda, y para ello, sabes bien que necesitas ver ya el 68 en la báscula mañana, así que hazte un favor, vete a andar y acuéstate en 3 o 4 horas y verás que ese número baja seguro. Asegúrate un bien día, venga. HAZ SOLO COSAS QUE SEPAS QUE TE AGRADECERÁS EN UN FUTURO."

Y bien, niñas mías, así fue. Mandé a tomar por saco de una patada toda mi gandulería, salí a caminar un rato y aguanté sin acostarme viendo la tele. Y LO MEJOR es que yo cuando veo la tele de noche es cuando más me apetece tomarme ese vasito de leche chocolateada con magdalenas, galletas, dulces, dulces, dulceeeeeeeeees. PERO no lo hice. No comí nada de nada de nada en absoluto. Y mirad que mi cerebro me quería sabotear: "Nena, has cenado muy poco (para ser tú) y han pasado ya más de 3 horas. Sabes que cuando te acuestas con un poco de hambre no duermes bien y no descansas nada (esto es cierto, ¿eh?). Será mejor que te des un paseíto por la cocina y cojas alguna cosa. No hace falta que sea un dulce. Coge un poco de jamón york, o atún, o un tomatito. Venga, que no pasa nada"

¡Y una mierda! Yo eso no lo iba a hacer. Primero, porque a esas horas, cuando empiezo con un poco "para dormir bien" (EXCUSAS, EXCUSAS Y MÁS EXCUSAS, YA HABÍA COMIDO SUFICIENTE) acabo comiéndome toda la mierda dulce del armario. Segundo, porque cada vez que he hecho eso de tomar algo justo antes, aunque de verdad haya sido muy muy poco, mi cuerpo lo ha absorbido como si no hubiera un mañana y al día siguiente el número en la báscula no ha bajado ni medio miligramo.

Así que, como una campeona, le dije al diablillo saboteador de mi cabeza: ¡QUE TE DEN POR EL CULO! y me fui a dormir con el estómago vacío y esta mañana había roto la barrera de los 69 kg para pasar a 68,7.

Hoy en mi trabajo de repartir propaganda iba haciendo cuentas de cuánto había perdido en cuánto tiempo y que si seguía siempre a ese ritmo, cuánto podría perder de aquí al día 24 que me mudaré a Francia a trabajar como ayudante de profesor de español y me veía poniéndome mis vaqueros de la talla 38 y mis camisetas de delgada y todas esas cosas que me ponen el alma blandita jajaja.

Voy a ver si me pongo a estudiar un rato, que muy bien por la parte "ir bajando de peso", pero muy mal por la de "ir aprobando alguna cosa en septiembre"...

Un besazo y muchas gracias por comentar y por vuestro apoyo. Es increíble lo que me podéis llegar a ayudar sin saberlo :)

1 comentario:

  1. Esta mente traicionera nuestra, que a veces nos juega una mala pasada! Pero no caiste!!! Lo estas haciendo superbien, a seguir asi y veras que bien estas para el 24:)
    Es genial que te vayas a francia, espero que nos sigas escribiendo desde alli y nos cuentes como es aquello! Mucha suerte con la dieta, sigue asi!
    un beso enorme

    ResponderEliminar

Gran parte de mi fuerza de voluntad depende de vuestros comentarios de ánimo. ¡Gracias!