jueves, 18 de octubre de 2012

Día 1

Me paso a las proteínas.
He hecho una compra hoy de la que no me pienso salir en un tiempo, al menos hasta que vea algún mínimo resultado: pollo, carne picada, palitos de mar, salmón ahumado, huevos, tacos de bacon, atún...
No pienso comer ni un hidrato, cero patatero.
Me va a dar un síndrome de abstinencia del copón, pero me da igual, ya va siendo hora de enfrentarme a mí misma. Yo me lo he buscado, pues yo tengo que ponerle solución, y punto. He comido ya y me he pasado la mañana haciendo recados y he ido a todos sitios sin coger el bus (y cada sitio al que tenía que ir estaba a más de media hora a pie) así que, si he salido de casa a las 10:30 y he llegado a las 14:00, pues se puede decir que todo ese tiempo me lo he pasado andando sin parar de acá para allá.

También, mi gran problema es la pereza. Para todo. 
Siempre lo dejo todo para después:
 estudiar para un examen, hacer cosas pendientes, limpiar la casa, lavarme el pelo y arreglármelo, salir a andar, cocinar sano, hacer un dieta decente ("mañana, mañana empiezo, lo juro"), incluso salir con amigos y tener una vida social decente (lo de la vida social va por rachas, ahora tengo una racha de vaga pero hay veces, sobre todo cuando más delgada estoy, que no paro por casa y mis compañeros de piso se olvidan de mi cara).

Pues hoy no. 

Ayer no curraba y hoy tampoco. Hoy me he levantado sin ganas de hacer nada, como ayer. Solo que ayer tiré el día a la basura y hoy, por el contrario, nada más levantarme me he lavado la cara, me he vestido y me he dicho a mí misma que aunque no me apetezca hacer algo, lo tengo que hacer. He ido a hacer todas mis cosas pendientes, además andando a todos lados mis buenas 3 horas y pico. Me he levantado decidida a hacer mi dieta de proteínas también. El martes por la noche me dije que ayer miércoles empezaría. Ayer no empecé. Y ayer noche me dije que empezaría hoy. Y al levantarme no tenía ganas e iba a tirar todo por la borda, hasta que me he dicho a mí misma: "Pero, ¿qué coño es esto? ¿Hoy igual que ayer? ¿Y mañana igual? Y luego pasan los años y te quejas de que sigues siendo la misma. Tú eres el resultado de tus decisiones. Decide que vas a mover el culo y que vas a estar activa aunque no te apetezca una mierda. Te lo agradecerás."

Nadie va a venir a salvarme. No quiero que nadie venga a salvarme. Ya me tengo a mí misma.


2 comentarios:

  1. Me encanta ver que has tomado una decisión y has vencido a los demonios de la pereza! Esta claro que el cuerpo es vago y si no e metemos caña se acostumbra y nos hace la vida imposible porque nuestra mete, por el contrario, necesita emción, cambios. Muchas gracias por haberte pasado por mi blog y te deseo muchos ánimos guapísima!

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  2. estoy muy de acuerdo con eso de que SOMOS nuestras decisiones, y tambien de que DECIDAD HACER y no lo pienses tanto. A que hoy estas muy orgullosa de ti? GENIAL eso te motiva.
    Además, te recuerdo que estas en Francia, un ligar pecioso, sal a conocer a perderte. Si estas echada en tu casa mejor and a echarte a un parque, arreglate y haz qwue tus dias sean diferentes, si pudiste hoy, puedes siempre. Obvio qe vas a lograrlo. Un beso bonita =)

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